FAMILIAS-HORA-RIVALIZACIÓN Aprendiendo a ser un ‘Gran Hermano’

sidebar-image

Upcoming Events

octubre 12, 2022

Fecha: 25 de noviembre de 2010

BC-FAMILIAS-HOY-RIVALES-NYTSF
APRENDIENDO A SER UN `HERMANO MAYOR’
Por T. BERRY BRAZELTON, M.D., y JOSHUA SPARROW, M.D.

c.2010 T. Berry Brazelton, M.D., y Joshua Sparrow, M.D.
Distribuido por The New York Times Syndicate y reproducido con permiso de The New York Times Syndicate

El nuevo bebé ha llegado a casa y de repente el hermano mayor no recibe la misma atención que antes. El recién llegado es cada vez más exigente con su madre, cuya energía puede no haber regresado todavía.

Las exigencias del hermano mayor también aumentan. Es casi como si tuviera que hacer una prueba para estar seguro de que su madre se recuperará y de que aún puede cuidar de él. Las burlas y las pruebas, el rechazo a la hora de dormir y el despertar cada vez que el bebé lo hace… todo es de esperar.

A veces un niño mayor asumirá el papel de ayuda de “hermano mayor” o “hermana mayor”, pero no se deje engañar. Junto con el orgullo de ayudar, y su descubrimiento de que es más “adulto”, seguirá resentido con el bebé y se sentirá triste por haberle perdido.

Puede dejar claro que hay momentos en los que puede ayudar, y momentos en los que puede ser un bebé, también. Le dice: “¿Por qué la necesita? Puedo hacer cualquier cosa que ella pueda. Puedo seguir siendo tu bebé y complacerte”. Está afrontando una de las crisis de la vida y aprendiendo a sobrellevarla en la seguridad de sus cariñosos cuidados.

Espere que el niño mayor vuelva a perder terreno en algún momento. Normalmente es en el área de desarrollo que acaba de dominar. Si ha empezado a hablar, puede recurrir al lenguaje infantil. Si se alimenta por sí mismo, duerme toda la noche, aprende a ir al baño o conquista el miedo a los extraños, cuente con un retroceso. Esto es lo que llamamos un punto de contacto, una caída temporal que anticipa un nuevo paso adelante. Está aprendiendo a ser un hermano mayor.

Piense en lo que significa para el niño mayor que un bebé de dos meses se queje todas las tardes y los padres se apresuren a atenderlo. Puede ayudarle a comprender sus sentimientos. Se esfuerza por entender al nuevo bebé y por imitarlo. “Por supuesto que quiere hablar como el bebé: Todo el mundo le presta mucha atención ahora”. O, “No te preocupes por mojar la cama. Cuando te acostumbres a tener una hermanita, dejará de hacerlo”.

Su comprensión será mucho más eficaz que enfadarse o presionarle para que sea un “niño grande”. Estas respuestas están destinadas a convertirse en ofertas aún más dramáticas para que le deje ser su bebé de nuevo.

Algunos niños parecen navegar a través de estos primeros meses. Son complacientes, incluso serviciales. Pero este interludio no durará. El precio de un nuevo papel tan desafiante para un niño puede tener que pagarse en un punto de contacto posterior, o en reacción a uno de los propios puntos de contacto del bebé.

Cada uno de sus pasos hacia atrás es una oportunidad para que usted y el niño aprendan juntos a dominar la siguiente etapa de desarrollo.

Es posible que un hermano mayor de 5 ó 6 años no exprese su resentimiento y frustración mediante rabietas o crisis; en cambio, puede idear formas de atraer su atención derramando cosas, cayéndose o necesitando su ayuda con los deberes. O puede acudir a su lado como si quisiera ayudar, sólo para arrastrarse y volverse descarado con usted.

Pero necesita la misma comprensión que un niño más pequeño. Será más capaz de decirle cómo se siente que su hermano, y más capaz de ayudar de forma útil una vez que se sienta comprendido.

Disciplinar al niño mayor

  • Deténgalo con firmeza pero en silencio.
  • Sujételo o utilice un tiempo muerto si está dispuesto a cumplirlo.
  • Levántelo para abrazarlo y amarlo. “Es duro tener una hermanita, ¿verdad? Pero no puedo dejar que lo hagas y lo sabes. Debo estar aquí para detenerte hasta que puedas detenerte”. Observe su cara y sus ojos lo asimilan y se suavizan.
  • Una vez que haya establecido contacto con él y se sienta de nuevo cerca, deje que le ayude con el bebé. De esta forma, empezará a percibir el objetivo de la disciplina y a sentirse como un “hermano mayor”.

(Este artículo es una adaptación de “Understanding Sibling Rivalry”, de T. Berry Brazelton, M.D., y Joshua D. Sparrow, M.D., publicado por Da Capo Press, miembro de The Perseus Books Group).

Back to

Get Involved

Learn With Us

Babies and children, families and communities do the research on what it takes for them to flourish. Listen with us to what they’ve been learning. Watch a webinar. Check out the Indigenous Early Learning Collaborative. Join the Brazelton Touchpoints Center Learning Network. Join the conversation.

Picture of smiling boy